Terabitia | Desideratum (La fuerza de un deseo)
Cuenta la mitología griega que Teseo, tras matar al Minotauro, fue honrado con una ensalada de verduras a base de dientes de león, para purificar su sangre. Los magos del siglo XVI creían que, si frotaban su cuerpo con un diente de león, obtendrían poderes del más allá. En la Inglaterra victoriana, el lenguaje de las flores determinaba que al recibir esta flor se enviaba un mensaje de fidelidad…
De todo ello ha llegado hasta nuestros días una creencia que todos hemos tratado de seguir alguna vez: basta soplar con cierta fuerza un diente de león (Dandelion) para llenar de esporas el aire y, según la tradición, que se nos conceda un deseo. Inspirada en todo este imaginario, Terabitia –ganadora de la primera convocatoria de Premio Talento FLORA, en la que damos espacio a nuevos creadores– ha ideado una instalación floral de lectura sencilla y directa, como son los mitos de la infancia. Pero no solo. El diente de león es una hermosísima prueba de la fuerza de lo aparentemente frágil. Que no te engañe su delicadeza: es capaz de crecer en las condiciones climáticas y de terreno más difíciles. ¿Será que hemos aprendido algo de ella en el último año?
Sobre la instalación:
“Este diente de león poético brota haciendo una grieta en el suelo yermo de la adversidad.
Este diente de león se yergue desafiante y nos invita a soplarlo con fuerza para pedir que nuestros deseos se cumplan.
Este diente de león nos convierte en niños.
Soplemos, con intensidad, desde la más profunda de nuestras honduras, desde la ilusión de nuestros corazones infantiles, desde la certeza del entusiasmo, desde la potencia de la ternura (que no hay nada más poderoso que un gesto afable).
Soplemos y formemos una estela de esporas deseosas de salir a una realidad que nos haga mejores, y más dichosos. A TODOS.
Porque seguir soñando es una necesidad, porque con fuerza, denuedo y determinación se han de hacer realidad nuestros anhelos.
Soplemos por un mundo más amable, por favor.
Ese es mi DESIDERATUM
¿Cuál es el tuyo?”
Carolina Estévez, Terabitia
